Las calderas con quemadores diésel o gasoil cuentan con amplia posibilidad de ventajas, entre las cuales resaltan:
- Disponibilidad. Las calderas que funcionan con quemadores diésel tienen un depósito de combustible con una capacidad de 1000 litros. La adquisición del combustible puede ser en zonas urbanas y/o rurales.
- Menos gastos en instalación y mantenimiento. Los precios pueden ser más bajos que para otro tipo de calderas. Asimismo, los costes del mantenimiento de éstas son menores.
- Menor contaminación. La quema de gasoil no genera monóxido de carbono.
- Tienen mayor duración. Son más duraderas debido a que la quema de gasoil para la calefacción beneficia el mantenimiento de la caldera.
- Mayor seguridad. Las calderas trabajan a temperaturas más bajas reduciendo el riesgo de explosiones.
Thermal Combustion ofrece una amplia gama de quemadores diésel de una etapa, dos etapas y modulantes de la marca Riello para beneficio del cliente y la industria.
