Los quemadores de gas fueron los primeros en desarrollarse. Su funcionamiento se ha desarrollado pero sigue manteniéndose relativamente simple. La entrada de combustible se da por una rampa de gas. Esta está formada principalmente por un filtro de gas y un regulador de presión.
A continuación, el gas llega a la válvula de seguridad y a una válvula de regulación. Posteriormente, alcanza el cabezal de combustión del quemador. Estos quemadores son muy versátiles. Trabajan con procesos de vapor, absorción de refrigeración y más.
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